Zaira Bruno Chiroque es una lideresa destacada en la comunidad de La Islilla, una localidad costera del norte de Perú. Su papel en la Asociación de Líderes de La Islilla (ASLI) ha sido clave para la organización de iniciativas comunitarias, desde proyectos de conservación ambiental hasta la promoción de oportunidades económicas para las mujeres. En esta entrevista, Zaira nos cuenta sobre su camino como lideresa, los desafíos que ha enfrentado y su visión para el futuro de La Islilla.
- Zaira, cuéntanos, ¿cómo ha sido tu camino como lideresa en La Islilla y qué te motivó a asumir este rol?
Mi camino como lideresa ha sido un proceso de aprendizaje y crecimiento. Al principio fue difícil, porque no teníamos experiencia en organización comunitaria, pero poco a poco nos fuimos adaptando y fortaleciendo.
“Me motivó el deseo de mejorar las condiciones de vida en mi comunidad y demostrar que las mujeres podemos ser agentes de cambio. A través de ASLI, he aprendido a tomar decisiones, a participar en proyectos y a trabajar en equipo por el bien de todos.”
- ¿Cuáles han sido los principales desafíos que has enfrentado como mujer en tu comunidad?
Uno de los mayores desafíos ha sido la falta de oportunidades económicas y la necesidad de garantizar el bienestar de nuestras familias en tiempos difíciles. Cuando la pesca se vuelve escasa, muchas mujeres nos vemos en la obligación de buscar alternativas para alimentar a nuestros hijos y sostener nuestros hogares.
Zaira enfática dice “nosotras somos la verdadera cabeza del hogar”.
Pero la mayoría de veces el rol de la mejor está invisibilizado por una falta de retribución económica. También afirma que “ha sido un reto cambiar la mentalidad de algunas personas que creen que las mujeres solo deben dedicarse a la casa.”
“Poco a poco hemos ido demostrando que podemos trabajar, liderar y contribuir al desarrollo de La Islilla.”
- ¿Qué te impulsó a buscar oportunidades de trabajo fuera de La Islilla?
“La escasez de pesca fue uno de los principales motivos. En nuestra comunidad, la pesca es la base de la economía, pero cuando la producción disminuye, las familias enfrentamos dificultades económicas.”
Por esa razón, tuve que salir a trabajar en una empaquetadora para poder ayudar con los gastos del hogar. Fue una decisión difícil, pero necesaria para garantizar el bienestar de mi familia.
- ¿Cómo ha cambiado tu vida y la de tu familia desde que empezaste a trabajar fuera de la comunidad?
Ha sido un cambio importante. Antes, la mayoría de las mujeres de La Islilla se dedicaban exclusivamente al hogar, pero al salir a trabajar, he podido mejorar la estabilidad económica de mi familia y demostrar que podemos contribuir en muchos aspectos. Además, he adquirido nuevas habilidades y experiencias que me han fortalecido como persona y como lideresa.
- ¿Qué aprendizajes has obtenido de esta experiencia que podrían ser útiles para otras mujeres de La Islilla?
“Lo más valioso que he aprendido es a confiar en mí misma y en mis capacidades. Muchas veces dudamos de lo que podemos lograr, pero cuando enfrentamos desafíos, nos damos cuenta de nuestra fortaleza.”
También he aprendido la importancia de la organización y la solidaridad entre mujeres. Si nos apoyamos mutuamente, podemos lograr grandes cambios en nuestra comunidad.
- ¿Cuál es tu rol en ASLI y cómo ha impactado en las mujeres y familias de La Islilla?
Mi rol en ASLI es trabajar por el desarrollo de nuestra comunidad, identificando desafíos y buscando soluciones. Actualmente, estamos llevando a cabo el proyecto de la compostera comunitaria, donde reciclamos residuos orgánicos para generar abono y crear áreas verdes. Esta iniciativa ha permitido que más mujeres participen activamente en el cuidado del medio ambiente y en la búsqueda de alternativas [económicas] sostenibles.
- ¿Crees que las mujeres tienen las mismas oportunidades que los hombres en La Islilla? ¿Qué falta mejorar?
Hoy en día, las mujeres tienen más oportunidades que antes, pero aún hay mucho por hacer. Antes, se pensaba que nuestro único rol era el hogar, pero con el tiempo, hemos demostrado que podemos emprender, trabajar y liderar. Sin embargo, es necesario seguir concientizando a la comunidad sobre la importancia de la igualdad de oportunidades y fomentar la educación y capacitación de las mujeres para que puedan desarrollarse en distintos ámbitos.
- ¿Qué estrategias propones para que más mujeres asuman roles de liderazgo en La Islilla?
Para fomentar el liderazgo femenino, es fundamental brindar capacitaciones y charlas sobre liderazgo, emprendimiento y desarrollo personal. También es importante crear espacios de participación donde las mujeres puedan expresar sus ideas y contribuir activamente en la toma de decisiones.
“Si fortalecemos la confianza y el conocimiento de las mujeres, podremos impulsar cambios significativos en nuestra comunidad.”
- ¿Cómo puede la pesca artesanal de La Islilla adaptarse a la disminución de los recursos marinos?
Es un desafío grande, pero creo que podemos adaptarnos diversificando nuestras actividades económicas.
“Además de la pesca, podemos impulsar el turismo sostenible, promoviendo nuestras hermosas playas y ofreciendo experiencias como la gastronomía y la artesanía local.”
- ¿Cuál es tu sueño para La Islilla y qué se necesita para hacerlo realidad?
“Mi sueño es que La Islilla sea una comunidad próspera, con acceso a servicios básicos como agua potable y saneamiento, con oportunidades económicas para todos y con un entorno sostenible.”
Para lograrlo, necesitamos el apoyo del gobierno y de organizaciones que promuevan el desarrollo comunitario, mejorando la infraestructura y ofreciendo programas de capacitación y financiamiento para los emprendedores locales.
Quiero decirles a todas las mujeres de La Islilla y de otras comunidades que no tengan miedo de asumir roles de liderazgo. Somos capaces de generar cambios positivos y construir un futuro mejor para nuestras familias y nuestra comunidad. Si trabajamos juntas, podemos lograrlo.
Published Mar 06, 2025
